lunes, 21 de diciembre de 2015

Reflexión tras el 20D

Hoy me parece un día estupendo para abrir un nuevo blog, más si es mi blog. Ayer, 20 de diciembre,  fue un día importante para la democracia en España. Tuvieron lugar las XI elecciones a las Cortes Generales. Los españoles tuvimos la llave para cambiar el panorama político del país. Se presentaban como las elecciones que marcarían un antes y un después.

La historia de España está marcada por el bipartidismo. Desde 1982, año en que el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) ganaría por primera vez las elecciones con Felipe González al frente (en 1977 y 1979 Unión de Centro Democrático de Adolfo Suárez, fue el partido ganador) se han sucedido los dos partidos mayoritarios en el poder, Partido Popular (PP) y PSOE.

En 2011 el PP logró obtener la mayoría absoluta. Se presentaron como la gran solución a la de España  que se venía enfrentando desde un par de años antes a la famosa crisis. José Luis Rodríguez Zapatero (PSOE), predecesor en el cargo en la anterior legislatura, quiso negar el hecho  del comienzo de una crisis a nivel mundial dejándolo en una falacia y puro catastrofismo. Los populares supieron aprovechar el tirón de la mala gestión con una agresiva campaña. Ellos iban a ser los salvadores del país, la solución a todos los males de población la española.  Presentaron un programa electoral de ensueño pero cuando llegaron al poder se desvaneció el humo y mostraron lo que realmente son. Contra todo pronóstico esperanzador desde 2011 se han vivido los peores cuatro años de la democracia española. Su gran argumento para justificar las medidas tomadas ha sido la herencia recibida, a día de hoy les dura el hilo de la cinta.

No les bastó con tomar como primera medida una subida de impuestos. Aprobar una reforma laboral que solo beneficia a los empresarios para lucrarse a costa del trabajador. Derogar la reforma del aborto que reconocía el derecho de la mujer a ser dueña de su cuerpo. La derogación de la ley de dependencia, la LOMCE  y tantas otras medidas más unidas al destape de los mayores casos de corrupción en comunidades como Madrid o Valencia.  La nefasta gestión, el castigo a los ciudadanos y las ansias de cambio han dado pie al nacimiento de nuevos partidos, Podemos y Ciudadanos (C’s).


Ayer se produjo la ruptura en la sucesión del poder protagonizada por PP y PSOE. Podemos y C`s han entrado demostrando que cabe la posibilidad de llenar con nuevos colores el Parlamento. Sin embargo, la misma situación de esperanza lleva a otra de desconcierto. Con la nueva fragmentación de la cámara ninguno de los cuatro partidos obtiene los votos suficientes para poder formar gobierno en solitario, quedando la ciudadanía desprotegida durante un tiempo hasta conocer quién será el elegido. Hoy, 21 de diciembre, el día después del gran cambio nos toca reflexionar si realmente es esto lo que queríamos. 

3 comentarios:

  1. Yo opino que nadie se ha quedado satisfecho, todos iban con intención de gobernar, y cada votante quería que ganara su partido favorito. Dejando la percepción partidista, (de cualquier partido). Lo que sí está claro es que la sociedad española está cansada de ser la gran sufridora de las medidas que han llevado a cabo en los últimos años. Hoy día esta sociedad madura democráticamente lo que quiere es DIALOGO, CONSENSO y que dejen de gobernarlos con las puertas cerradas y de espaldas a esta sociedad. La cuestión que yo me planteo... ¿Serán los partidos políticos lo suficientemente "maduros" para saber cumplir el mandato dado en las urnas o tendrán que dejar que la sociedad tenga que volver a votar en unos meses?

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  2. ... puede que esto no fuera lo que queríamos, pero hemos empezado el camino :)

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  3. Quizás es el comienzo del camino, un poco más complicado de lo que se esperaba. Esperemos que nuestros dirigentes estén a la altura de las circunstancias y miren por los intereses de la ciudadanía.

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